A Man Called Otto

Tom Hanks produce y protagoniza esta historia de un hombre jubilado y malhumorado, que siente que no tiene mucho más que hacer en la vida luego de la muerte de su esposa y solo se dedica a hacer respetar las reglas en todo el vecindario. La llegada de una familia latinoamericana hace que su rutina asuma una nueva dimensión.

El periodismo aquí surge de modo lateral, aunque tiene una importancia vital en la trama. Otto llega a una estación de trenes para quitarse la vida, pero un hombre sufre antes un desmayo y cae en las vías. El personaje de Hanks no duda en salvarlo, mientras el resto de las personas se dedica a registrar la escena con sus teléfonos móviles, en vez de intentar colaborar en el rescate. Las imágenes se viralizan y una influencer y periodista “de redes” (Kelly Lamor Wilson) se acerca hasta el barrio para retratar al héroe. Otto se mofa del “periodismo de redes” y la echa de mal modo. Sin embargo, cuando la situación del vecindario se complica ante las extorsiones de una agencia inmobiliaria, el protagonista la convoca para que la influencer transmita en vivo el intento de desalojo de una pareja de personas mayores. Así, este nuevo tipo de periodismo asume el viejo rol de guardián de los derechos ciudadanos y de denuncia de los abusos empresariales.

Está basada en la novela A man called Ove, del escritor y periodista sueco Fredrik Backman, que ya había sido llevada al cine en 2015 bajo la dirección de Hannes Holm y obtuvo nominaciones a la mejor película extranjera y al mejor maquillaje en los premios Oscar.