1936 |
Estados Unidos
Next Time We Love
Cuando volvamos a amarnos
Director: Edward H. Griffith
Reparto: James Stewart, Margaret Sullavan, Ray Milland
Periodismo como tema: Intermedio
IMDB: 6,4/10 |
Letterdbox: 3,3/5
Un periodista y una actriz, ambos de gran ambición profesional, ven cómo se complica el matrimonio ante el deseo de avanzar con sus carreras.
Primera actuación protagónica de James Stewart, en este melodrama interpreta al joven Chris Tyler, quien aspira a convertirse en un periodista de renombre y buen pasar. “Tu serás rico e importante”, pronostica su novia (Sullavan), que también sueña con ser una actriz destacada.
Luego de una serie de artículos sobre la situación europea de finales de los años ‘20, realizados desde la redacción en Nueva York, a base de su buen conocimiento de varios idiomas y un poco de fantasía, que incluye una reseña elogiosa del ascenso de Benito Mussolini al poder, Tyler tiene la gran oportunidad profesional de ser acreditado como corresponsal extranjero en Roma. Sin embargo, su mujer está embarazada y, pese a que ella lo oculta para que Chris pueda crecer en su profesión, él se entera y decide regresar a su hogar, a costa de perder su empleo. Así, lo que se presentaba como una comedia rápida y juvenil se va transformando en un melodrama de desencuentros y renunciamientos cruzados, en la que ambos crecen profesionalmente, pero no logran disfrutar de su vida matrimonial.
Stewart logró el papel gracias a las insistentes gestiones de su amiga Sullavan. El director Griffith había comenzado su carrera laboral como periodista.
Luego de una serie de artículos sobre la situación europea de finales de los años ‘20, realizados desde la redacción en Nueva York, a base de su buen conocimiento de varios idiomas y un poco de fantasía, que incluye una reseña elogiosa del ascenso de Benito Mussolini al poder, Tyler tiene la gran oportunidad profesional de ser acreditado como corresponsal extranjero en Roma. Sin embargo, su mujer está embarazada y, pese a que ella lo oculta para que Chris pueda crecer en su profesión, él se entera y decide regresar a su hogar, a costa de perder su empleo. Así, lo que se presentaba como una comedia rápida y juvenil se va transformando en un melodrama de desencuentros y renunciamientos cruzados, en la que ambos crecen profesionalmente, pero no logran disfrutar de su vida matrimonial.
Stewart logró el papel gracias a las insistentes gestiones de su amiga Sullavan. El director Griffith había comenzado su carrera laboral como periodista.
Manuel Barrientos y Federico Poore