2004 |
Argentina
Peligrosa obsesión
Peligrosa obsesión
Director: Raúl Rodríguez Peila
Reparto: Carol Castro, Mariano Martínez, Pablo Echarri
Periodismo como tema: Lateral
IMDB: 4,4/10 |
Letterdbox: 2,1/5
Un camionero argentino conoce a un misterioso compatriota en Rio de Janeiro. Con la ayuda de una periodista brasileña, enfrentarán a una organización criminal que sigue sus pasos.
Javier Labat (Pablo Echarri) es un camionero argentino que realiza un transporte de rutina a Río de Janeiro y en un partido de fútbol improvisado conoce a Tony Corsini (Mariano Martínez), un compatriota que se suma a su equipo, aunque terminan a las piñas contra los rivales brasileños. Huyen en el Volvo de Labat, son perseguidos por un Scania, después se suma la policía a la pesquisa, atraviesan el puente internacional Río-Niteroi (la mejor escena de acción de la película) y caen al mar. Regresan en avión a la Argentina, Labat tiene unas pesadillas en pleno vuelo, cuando aterriza va a buscar su bolso y descubre que está lleno de cocaína. Le pide ayuda a Corsini, van al baño a tirar la droga antes de que la policía los detenga y se encuentran con una joven brasileña, Marina Leao (Carol Castro), que llora a escondidas. Escapan los tres haciéndose pasar por japoneses. Se van para la casa de Labat y descubrimos que en realidad es parte de una familia propietaria de una gran empresa de transportes y que el padre está en coma, luchando por su vida, luego de un accidente -en el que murió el hermano menor-, porque había descubierto que uno de los camiones tenía un cargamento de drogas.
La trama sigue con persecuciones de policías corruptos, de los narcos, un tío traidor que tiene internado al padre de Labat en su casa, una femme fatale, bailes de strippers, torturas con hormigas y miel, un triángulo amoroso, un escondite en un coto de caza y la intervención de la DEA. En un momento, los malhechores capturan a Marina y le reprochan a Labat porque la piba es reportera del Jornal do Brasil. Labat y Corsini logran liberarla y le preguntan por qué les ocultó que era periodista. Ella les dice que no se podía perder la gran primicia de su vida, pero que ahora no le interesa el periodismo y que va a escribir una novela de amor.
El guión es del periodista y escritor Marcelo Figueras, Daniel Botti y Carlos Mentasti.
Manuel Barrientos y Federico Poore