107
1951 |
Suecia
Sommarlek
Juventud, divino tesoro / Juegos de verano
Director: Ingmar Bergman
Reparto: Alf Kjellin, Annalisa Ericson, Birger Malmsten, Maj-Britt Nilsson
Periodismo como tema: Lateral
IMDB: 7,5/10 |
Letterdbox: 3,8/5
N Venecia
Una bailarina recuerda un amor de juventud. Su novio actual es un periodista un tanto intrusivo.
“Una de las películas más bellas de la historia”, de acuerdo a Jean-Luc Godard, significó la irrupción internacional del gran maestro sueco Ingmar Bergman. Logró primero repercusión en Uruguay y la Argentina con el impulso del crítico Homero Alsina Thevenet, para luego ser reconocido por la prensa europea. Las ensoñaciones, la muerte, el enojo con Dios, los espejos, el ajedrez son algunos de los tópicos que están presentes y serán marcas clásicas del cine de Bergman.
Con un lirismo potente y una gran libertad formal, narra la historia de una bailarina (Marie) que durante un verano se enamora de un joven que conoce en un pueblo costero. La idílica historia de amor se interrumpe de forma trágica. Trece años más tarde, Marie accede al diario íntimo de su enamorado, que se transforma en el canal para superar su crisis personal.
Su novio actual es un periodista del periódico El año. Entrometido, es una y otra vez expulsado por el personal del teatro en el que Marie ensaya una ópera de estreno inminente. Los empleados comentan. “Nunca ha habido un rumor sobre ella”, dice uno. “Porque llevas cuarenta años echando a la prensa”, es la respuesta. Sobre el final, el periodista escucha detrás de la puerta una conversación que mantienen Marie y un actor veterano. Celoso, irrumpe en la escena y entabla un tenso e irónico diálogo con su supuesto rival. “Podría hacer desaparecer tu talento, tu secreto, tu fama y tu estatus social. ¡Soy periodista!”, “Uh, gran maestro, eres el más poderoso”, le responde el otro. “¡Largo!”, “Me voy. Yo no escucho detrás de la puerta, tengo educación.”
Con un lirismo potente y una gran libertad formal, narra la historia de una bailarina (Marie) que durante un verano se enamora de un joven que conoce en un pueblo costero. La idílica historia de amor se interrumpe de forma trágica. Trece años más tarde, Marie accede al diario íntimo de su enamorado, que se transforma en el canal para superar su crisis personal.
Su novio actual es un periodista del periódico El año. Entrometido, es una y otra vez expulsado por el personal del teatro en el que Marie ensaya una ópera de estreno inminente. Los empleados comentan. “Nunca ha habido un rumor sobre ella”, dice uno. “Porque llevas cuarenta años echando a la prensa”, es la respuesta. Sobre el final, el periodista escucha detrás de la puerta una conversación que mantienen Marie y un actor veterano. Celoso, irrumpe en la escena y entabla un tenso e irónico diálogo con su supuesto rival. “Podría hacer desaparecer tu talento, tu secreto, tu fama y tu estatus social. ¡Soy periodista!”, “Uh, gran maestro, eres el más poderoso”, le responde el otro. “¡Largo!”, “Me voy. Yo no escucho detrás de la puerta, tengo educación.”
Manuel Barrientos y Federico Poore